lunes, 16 de marzo de 2020

Actividad de Prácticas del Lenguaje 5° A,B y C

*      Leé esta leyenda urbana y respondé en tu carpeta
La dama de blanco
El joven dobló por la calle Juncal, como todos los últimos sábados por la noche. Desde que Lucía lo había dejado, se había vuelto su recorrido habitual. El aire que salía de su boca se con- vertía en humo al encontrarse con el frío de agosto. Al llegar a la esquina de Junín, algo lo mo- tivó a cambiar de rumbo y unos metros más adelante, vio a una muchacha. Llevaba un vestido de un blanco radiante. El joven no pudo frenar el impulso de invitarla a tomar algo y darle su abrigo para protegerla. Entraron a “La Biela”, un bar tradicional del barrio de Recoleta.
Eligieron ubicarse junto a la ventana, alejados de la gente. Él le quitó el sobretodo a la mucha- cha, dejando la blancura del vestido nuevamente al descubierto, y le acercó la silla en un gesto de caballerosidad. Se sentaron enfrentados manteniendo la distancia que exigía la mesa.
Cuadro de texto: Ministerio  de  educación  • Material  de  distribución  gratuitaÉl no sabía con qué tema empezar la conversación. Tenía miedo de quedar en ridículo o es- pantarla. Se le ocurrió que la música era un buen tema. Así se enteró de que a ella le gustaba la música clásica y sabía tocar el piano. Cuando les trajeron el café supo su nombre: Luz María.
El joven notó que los hombres que estaban en el bar los miraban y murmuraban. No le pa- reció extraño siendo Luz María tan hermosa. Él se ofreció a acompañarla hasta la casa y en el puesto de flores de la calle Posadas, le compró un ramo de rosas. En el umbral de la puerta, entre miradas y sonrisas, la besó. Sintió un escalofrío y volvió a su casa pensando en ella.
Al día siguiente, decidió sorprenderla. Tocó el timbre de su casa y una señora mayor le abrió la puerta. Él le preguntó por Luz María y, entre llantos y gritos, recibió una respuesta inespe- rada. Su dama de blanco había muerto treinta años atrás.
Corrió al cementerio sin poder creer en las palabras de aquella mujer. Los nombres escritos en las lápidas le lastimaban los ojos. Su desesperada búsqueda llegó a su fin frente al nombre de Luz María grabado en el mármol. Cerró los ojos porque ya no quedaba nada por ver. Cuando el vacío del mundo se había hecho más grande, el aroma de las rosas se hizo presente y el joven volvió a sentir el mismo escalofrío de la noche anterior.
El sereno del Cementerio de La Recoleta declaró que era habitual, desde hacía treinta años, ver pasear a Luz María vestida de blanco los sábados por la noche.

Leyenda urbana, versión de Tatiana Lara Israeloff y Violeta Hadassi.



En esta leyenda aparecen varios elementos que, combinados, crean un clima de suspenso. vamos a rastrear algunos de ellos:
  a. ¿En qué época del año sucede la historia?
  b. ¿En qué momento del día el joven conoce a la dama de blanco?
  c. ¿En qué barrio de la Capital Federal están los personajes? ¿Qué hay en ese barrio?
 Gran parte de las historias de terror suceden en lugares que asociamos con el miedo, como un cementerio o un castillo antiguo. También suele hacer frío, lo que nos hace sentir más frágiles. Habitualmente transcurren de noche, cuando nuestros ojos no distinguen bien las formas y la luna nos envuelve con su luz mortecina.

Cosas que pasan dos veces
En la leyenda hay algunos elementos que se repiten.
El joven siente un escalofrío en dos momentos: cuando besa a Luz María y cuando está parado junto a su lápida.
• ¿Por qué creen que siente ese escalofrío en el cementerio?


• El joven siente un vacío en dos escenas: cuando no sabe qué decirle a Luz María en el bar y cuando ve su nombre escrito en el mármol en el cementerio. Vuelvan a leer la leyenda y encuentren cómo se llena el vacío que siente el joven en cada caso.
En el bar, el vacío se llena con   ____________________________.           
En el cementerio, el vacío se llena con _______________________.
Pistas: Uno de los elementos que llenan el vacío se puede escuchar. El otro, se puede oler.

El color blanco aparece varias veces a lo largo del texto. Así se logra acrecentar la sensación de vacío y crear el clima para una historia de fantasmas.